Mi derrota

Mi derrota

Querido amigo, a pesar
del tiempo transcurrido
su amor sigue con usted,
sigo siendo un amigo

y aunque le di detalles
y aunque en verdad la amo,
solo tú en su corazón
permaneces con pasión

mi intensión nunca fue la
de competir con usted,
puesto que conozco mis
desventajas hacia vos

querido amigo, hoy he
de aceptar mi derrota,
yo no soy como usted y
no soy lo que ella busca

solo quiero pedirle
un favor en nombre del
amor sentido a ella,
hágala feliz siempre

no permita apagarse
su sonrisa y sus ojos,
enamórese de ellos
como yo me enamoré

querido amigo, ande
búsquela, que ella lo
está buscando siempre
en todos sus recuerdos

perdónela, deje los
orgullos atrás, se que
usted aún la ama
y ella lo ama, aún más.

                                 Josué N. Martínez

Presos

Presos

I

Fue triste verlos,
con esa insignificante felicidad,
quizá más bien
inexistente

con esa falsa alegría
tan penosa y efímera,
con esa mirada perdida en los recuerdos
inalcanzables
que se esfuman con los sueños
como imágenes creadas por la mente propia

con esa resignación obligada
a su impotencia de cambio,
a su impotencia de remedio

fue triste verlos y ver en su mirada
el miedo al futuro consabido,
el miedo también al mañana
desconocido,
el miedo al presente
inevitable

es triste tener constancia de tanta tristeza,
es triste verlos alegrarse
esporádicamente
por pequeñeces mundanas
que sirven como un consuelo
amargo
y sin continuidades

es triste verlos tristes,
pero es más triste
su intento
de alegría.

                          Josué N. Martínez